Dormir entre montañas: cuatro hoteles para disfrutar de un invierno de lujo

Martes 31 de Enero del 2017

Nos están pidiendo los ojos paisaje invernal, estampa nevada y fuego de chimenea. Por eso nos hemos venido a dormir entre montañas, al abrigo de Sierra Nevada, los Pirineos, los Alpes suizos y las Rocosas estadounidenses. Casi nada. Luego vendrá el verano y querrán arena y playa (nuestros ojos). De momento, seguimos las huellas de Audrey Hepburn y Alfred Hitchcock a ver dónde nos llevan. Nos vamos otra vez de viaje.

Vincci Rumaykiyya, en Sierra Nevada (Granada)

En plena Sierra Nevada, más blanca que nunca, encontramos el hotel Vincci Rumaykiyya, que viene a ser un santuario de este deporte de invierno, pero también de la vida natural y la devoción por las cosas buenas (y bellas). Aquí se puede vivir la experiencia de dormir entre montañas, esos gigantes mitológicos que nos resguardan, además de darse en cuerpo y alma al siempre estimulante esquí. Para eso está el acceso directo a las pistas, telesilla a la puerta, y la tienda para alquilar equipo, amén de otros lujos de los que presume este cinco estrellas que se despereza en el mismo cielo que el Veleta y el Mulhacén.

Sol, nieve, terracita... En el Rumaykiyya de Granada (Foto: Adolfo Gosálvez)

Sol, nieve, terracita... En el Rumaykiyya de Granada (Foto: Adolfo Gosálvez)

Este es lo que se dice un hotel a pie de pista y en medio del cotarro de este deporte tan invernal, al amparo de la bella ciudad de Granada, cuyas suites despliegan encantos como el hogareño salón y la chimenea. El Rumaykiyya está en Pradollano, pedanía del municipio de Monachil, y tiene el aire alpino que se le puede pedir: mucha madera, barro y un spa (Nammu) para plantarle cara al frío. Se enorgullece de ser de los más altos de Europa. A más de 2.000 metros de altura.

Aquí se duerme a la sombra del Veleta y el Mulhacén (Foto: Adolfo Gosálvez)

Aquí se duerme a la sombra del Veleta y el Mulhacén (Foto: Adolfo Gosálvez)

Un plus: en su restaurante La Alquería podrás disfrutar de un desayuno bufet con productos de la tierra. A la hora de comer o cenar te esperan platos como el rodaballo al horno con piñones y pasas o el foie fresco a la parrilla en hojaldre con cebollitas glaseadas y salsa de miel.

Dónde: Urbanización Sol y Nieve. Sierra Nevada (Monachil). Granada.

Precio: desde 150 euros.

AC Baqueira Ski Resort, en el Pirineo catalán

Este hotel de nueva construcción nos devuelve al rincón de nuestra geografía que fue (y lo es) durante tiempo templo adorado del esquí, bendecido además por nuestra monarquía o, por decirlo de modo más 'juancarlista', por la familia del Rey. El AC Baqueira Ski Resort está en medio del Pirineo catalán y ofrece lujo no lo definiremos como alpino esta vez, sino pirenaico. A pie de pista también, como el granadino, dispone de teleférico a solo 30 metros y taquillas para los huéspedes, que podrán acceder al spa gratis, lo que lo convierte en un hotel de esquí con todas las de la ley (y con vistas). Desde la estación se ven las cumbres del Maladeta y el Aneto, nuestros 'tresmiles'. Y quien dice esquiar dice pasear en trineo tirado por perros.

El AC Baqueira, un hotel de lujo en el Pirineo catalán

El AC Baqueira, un hotel de lujo en el Pirineo catalán

Un plus: la visita por los pueblos del Valle de Arán, arquitectura tradicional, iglesia románica y paisaje alpino. Todos a más de 2.000 metros y todos bellos. Arties, Baguergue, Aubèrt, Casau...

Dónde: Avenida Perimetral, s/n. Urbanización Val de Ruda. Baqueira (Lérida).

Precio: un fin de semana de febrero, desde 304 euros.

Bradutt’s Palace, en St. Moritz (Suiza)

No es ya su atmósfera de lujo -realmente no hay quien dé más-, ni su enclave idílico en el mítico (y ostentoso) St. Moritz, sino el glamour que le han dejado en el aire sus huéspedes más ilustres. Aquí durmieron, entre montañas, Marlene Dietrich, Charlie Chaplin, Audrey Hepburn y hasta Alfred Hitchcock, lo cual eleva al Bradutt’s Palace al cielo de las estrellas de Hollywood. Y ahí sigue Le Gran Hall, su magnífico vestíbulo, el lugar de encuentro ideal para después de esquiar o en el verano alpino, que también existe; el Palace Wellness, su spa ecológico con productos vegetales orgánicos y tradiciones indias, japonesas o tailandesas, que es un imán; el King’s Club, refugio de la noche en este rincón rimbombante donde los haya, y ese servicio que es la cumbre de lo exclusivo: un mayordomo a disposición. Para colmo, el hotel se alza sobre el lago cristalino. Está a tres horas en automóvil desde el aeropuerto de Zúrich (y a 30 minutos en avión). Prepárate para el encanto mayúsculo.

El lugar ideal para tumbarse a la bartola: el Badrutt's Palace de St. Moritz

El lugar ideal para tumbarse a la bartola: el Badrutt's Palace de St. Moritz

Un plus: tiene pista privada de patinaje en invierno y dos pistas de tenis también privadas en verano. Y un Rolls-Royce en la puerta.

Dónde: Via Serlas, 27. St. Moritz (Suiza).

Precio: desde 400 euros.

Four Seasons Resort Vail, en Colorado (EEUU)

Parece el Tirol pero se trata de Colorado, allí donde las Montañas Rocosas tienen sus picos más altos (aquí pasamos a los 4.000 metros), al oeste de Denver, en el oeste a su vez de Estados Unidos. En Vail hay un tramo de 11 kilómetros con 193 pistas alpinas que también es una tentación para los practicantes del esquí -incluimos snowboard y ciclismo de montaña- y amigos del invierno en general. El placer será mayor aún si uno se aloja en el Four Seasons, que no solo ofrece habitaciones al uso, sino suites y residencias privadas con chimenea, balcones amueblados con vistas al pueblo o al jardín, y lujo, dicen, "al estilo europeo con toques de montaña". Por supuesto, el resort está a escasos minutos de las pistas y de la vida nocturna de Vail, que la tiene y mucha.

Así es el Four Seasons Resort Vail, en Colorado

Así es el Four Seasons Resort Vail, en Colorado

Un plus: los cortes de carne de su restaurante Flame, decorado igualmente en madera y piedra, con chimenea, vistas a las montañas y una terraza abrigadita esperando siempre a que salga el sol. O el chocolate caliente de su bar junto a la piscina.

Dónde: One Vail Road. Vail. Colorado (EEUU).

Precio: desde 390 euros.

Fuente: http://ow.ly/6t9R308wJCN