La diferencia esencial entre el orgasmo masculino y el femenino
El placer femenino sigue siendo un misterio para algunos hombres. (iStock)
Para la mayoría de nosotros, el modo en el que el sexo opuesto experimenta el orgasmo es uno de los grandes misterios de la vida. Por mucho que veamos a nuestra pareja gozar entre las sábanas y evidenciar su placer con muecas y gemidos entrecortados, siempre nos quedará la duda sobre cómo lo estará pasando, si de verdad o no estará sintiendo lo mismo que nosotros.
La idea de que las mujeres sienten el orgasmo de una manera más intensa está bastante extendida en la sociedad. Ya sea por la pornografía o por el predominio de los estereotipos en lo que se refiere al sexo, el consenso general nos dice que el placer masculino es más repentino y explosivo, mientras que el femenino es menos violento y más prolongado en el tiempo. Y parte de razón lleva, pero no toda.
Elogio del traje español
Una muestra en París rinde homenaje a una tradición folclórica que ha inspirado a diseñadores como Balenciaga, Yves Saint Laurent y Karl Lagerfeld
Una de las salas de la exposición 'Trajes españoles entre sombra y luz'. Victor Hugo - Palais Galliera
Cuarenta trajes folclóricos, procedentes de distintos rincones de la geografía española, se exponen en la casa-museo de Victor Hugo, tal vez el más hispanófilo de los escritores franceses, sobre las arcadas de la Plaza de los Vosgos, en el barrio parisiense del Marais. La muestra, titulada Trajes españoles entre sombra y luz, rinde homenaje hasta el 24 de septiembre a las manos anónimas que los bordaron y luego transmitieron su sabiduría de una generación a la siguiente. Los conjuntos expuestos, procedentes de la colección del Museo del Traje de Madrid, dibujan un extenso arco temporal, que empieza a finales del siglo XVIII y termina a principios del XX, y permite comparar siluetas, cortes, bordados, materias y texturas. También realidades geográficas e identidades culturales de diferente índole.
4 tratamientos estéticos que te harán brillar este verano
Foto: Gtres
Días de playa, noches de esta... Pero claro, todo tiene sus inconvenientes. Quizá aún no has logrado desprenderte de esos centímetros de más o sientes tu piel ácida y has dejado todo para el último momento. O tienes problemas circulatorios o retención de líquidos, y el calor hace que tus piernas se hinchen y las sientas pesadas. ¿Y tu rostro? También te preocupa que tu cara luzca espléndida en esas ocasiones especiales y que las horas de sol no hagan estragos en ella. Pues bien, CINCOS MEDICINA & ESTÉTICA te propone algunos tratamientos rápidos y eficaces para que te cuides antes, durante y después del verano.
La cantidad de calcio que debemos consumir según la edad que tengamos
- Pasarse o quedarse corto puede tener consecuencias para la salud
El calcio es el mineral más abundante del cuerpo humano. Aproximadamente el 99% del mismo se localiza en los huesos y en los dientes, mientras que el 1% restante se encuentra en otros tejidos participando en la coagulación sanguínea y en la transmisión nerviosa. Es, sin duda, el nutriente protagonista de la salud ósea.
Sin embargo, que sea esencial no quiere decir que debamos consumirlo en cantidades desproporcionadas pensando que igualmente nos hará bien, ni, desde luego, probar con suplementos que aumenten la dosis. Al igual que la falta de calcio puede producir problemas en el cuerpo, su exceso también conlleva consecuencias negativas.
Trucos para quemar más calorías sin cambiar tu rutina
puntarse al gimnasio e ir un par de veces a la semana no es suficiente para conseguir el cuerpo que deseas. No, al menos, cuando tienes una vida sedentaria. Y es que, pensándolo fríamente, tiene sentido que a la hora de perder peso adquieran más importancia las 23 horas restantes que pasas fuera del gimnasio a ese rato de ejercicio. Aun así, ante este argumento se tejen todo tipo de excusas: "No tengo tiempo", "no puedo ir andando al trabajo" o simplemente "es el tipo de vida que nos ha tocado tener". Y sí, aunque hay situaciones contra las que no se puede luchar, existen formas de adaptar unos hábitos activos y saludables al siglo XXI.